jueves, 30 de junio de 2011

Subiré el volumen real de las cosas

Vendrás a mí

como un árbol serruchado

a mi puerta.

Yo no te quiero así,

tormentoso.


Vendrás a mí

¿cómo encender leña mojada?


¿Por qué venir a taparme?

mi madre supo abrigarme

y siempre desperté.


Nunca fui Ofélica,

no hallarán perlas en mi cuerpo;

tal vez restos de un tiranosaurio rex,

una despedida reprimida,

y dos o tres carozos de aceituna.


Vendrás a mí

y subiré el volumen real de las cosas.

jueves, 14 de abril de 2011

wave goodbye

Leve, casi afónico
se fue
un verano mandarina.

Quedó liquidado
bordeando un zócalo
de aquella pileta.

Un verano mandarina
sin tiempo ni gusto.

Donde el hocico de un perro
elige el éxodo de la mariposa
y echarse a la sombra.

domingo, 9 de enero de 2011

Dientes de conejo

Hay un poquito de todo en este gramajo.

Con un botón desprendido, citaste:

Hemos comido como boas.

Y mis dientes de conejo aparecieron a las diez.

El susto de ser nosotros mismos

desapareció como un cuco de la luz.

Sus garras nos hacen reír.

Hay un dique en las bolsas de tus ojos.

Algunas noches, acumula sueño

Y puedo soñar todo lo que quiero.

(a boca abierta).

Porque el susto de ser nosotros mismos

no nos reprende.

Y los fantasmas se enredan a medida que gira la sábana.